¡Nunca, pero nunca saltes el tratamiento!

Si pudiera otorgarle el premio al producto que más salud le otorga al cabello, sin duda el que se lo merece es: el tratamiento. Los tratamientos son acondicionadores profundos, algo que tu cabello necesita constantemente, independientemente de que tipo de cabello tengas o si sientes que no lo necesitas porque tu cabello está "bien así".

Acondicionar profundamente es la acción de mantener tu cabello humectado e hidratado. En este proceso, cada cutícula absorbe nutrientes que necesita tu cabello para mantenerse sano y con brillo. Es un paso indispensable en tu rutina capilar que no debes saltar, dado a que los beneficios son innumerables y notables con el paso del tiempo.

Beneficios de acondicionar profundamente

Los ingredientes utilizados en los tratamientos están diseñados para hidratar y suavizar los cabellos maltratados por químicos (permanentes, alisadores, decoloraciones), expuestos a herramientas de calor (planchas, tenazas, secadoras) hasta cabellos que sufren por medicaciones (algunos cabellos se sienten secos por el uso de medicamentos). 

El uso de tratamientos también ayuda a mejorar la elasticidad del cabello al restaurar la humedad que permite un mejor estiramiento y tensión del cabello. Y te preguntarás ¿Por qué mi cabello necesita estirarse? El cabello que no se estira se parte fácilmente. Si tu cabello no es elástico, se rompería cada vez que lo amarras, peinas o hasta tocas. 

¿Cada cuánto debes acondicionar profundamente?

Cada persona tiene diferentes necesidades de acondicionamiento profundo. La mayoría de las personas están bien con el acondicionamiento profundo de 2 a 4 veces al mes. Si tu cabello está muy dañado o seco, deberías hacer un acondicionamiento profundo una vez a la semana.

Consejos para hacerlo bien y no morir en el intento

Por lo general, dejar un acondicionador profundo durante 5-30 minutos (dependiendo del estado de su cabello) debería darle a su cabello tiempo suficiente para absorber los nutrientes y la hidratación que ofrecen los acondicionadores profundos. Hay varias formas de acondicionar el cabello: Puedes aplicarlo en la ducha. Lo mejor es aplicar el acondicionador y dejarlo mientras te lavas y te afeitas. El vapor también ayudará a que el acondicionador se absorba mejor.

Otra forma de hacerlo es aplicando un acondicionador profundo en el cabello y dejándolo actuar durante un tiempo con un gorro de plástico. También puedes ponerte el gorro en el pelo y sentarte bajo una lámpara o secador caliente para que el acondicionador se filtre por el cabello. Hacerlo así permitirá que el acondicionador profundo penetre mejor en el cabello y también ayudará a que ciertos ingredientes se impregnen en la cutícula capilar. Cuando utilices un acondicionador profundo:

• Siempre lava primero el cabello con champú. El acondicionador profundo funciona mucho mejor con el cabello limpio.
• Aplique el acondicionador comenzando por las puntas y subiendo hacia el cuero cabelludo.
• No apliques demasiado. Esto puede apelmazar el cabello y hacer que parezca o se sienta graso.
• Enjuaga el acondicionador con agua fría. Esto ayuda a cerrar la cutícula del cabello, dejando todos los aceites nutritivos infundidos en el cabello.

Es muy necesario que el acondicionamiento profundo forme parte de tu régimen de cuidado del cabello. La conclusión es que, incluso con un acondicionamiento regular, es necesario un acondicionamiento profundo. Los cabellos tratados químicamente -incluidos los teñidos, con permanente o alisados- necesitan un acondicionamiento profundo adicional para que luzcan y se sientan brillantes, mejoren su manejabilidad y eviten que se rompan.